domingo, 9 de junio de 2013

Adiós al Rey Criollo del Rockandroll




                   


El pasado 22 de abril  en algún lugar de Buenos Aires, falleció a los 71 años Alberto Ramón García más conocido como “Pajarito Zaguri”.
 Guitarrista, cantante y compositor. Figura única, fundador y prócer del Rock Nacional.
Con los Beatniks coescribió y grabó en 1966   «Rebelde», considerada la primera canción de rock argentino.
 En Traslasierra  que también  fue su hogar, compartía su  música  y cosechaba  amistades.


Era una tórrida siesta de enero de 2009 en Nono. La despedida  de  un amigo en
común  nos hizo reencontrar luego de 12 años.
Después de aquellas zapadas inolvidables en “La Yola” y de algunas  presentaciones que hicimos a mediados de los noventa, no lo había vuelto a ver.
Pocos saben  que ese hombre de sombrero  con la camiseta  argentina, que alivia  su calor en una cerveza,  era una leyenda suburbana: “el mago de los vagos y el más divino de los náufragos,  un sobreviviente.”
Allí estaba “El Pájaro” esperando  en el cordón de la vereda.



GENESIS
Participó de una cofradía que tocaba en La perla, que incluía a Tanguito, Sandro, Javier Martínez o Mauricio Birabent (Moris).
Con su amigo Moris formó el dúo Los Shabaduba en 1956 y después  Los Beatniks, con el que  grabó en 1966  Rebelde/Nofinjas mas (simple), pieza fundacional del rock en español.

Más tarde integraría otras formaciones como Los Náufragos y La Barra de Chocolate, marcando la historia de nuestra música.


DISCOGRAFÍA
 Rebelde” con Los Beatniks (1966),  La Barra del Chocolate”(1969) , “ Los Náufragos”(1969),  Rock de las heridas”  con Piel del pueblo (1972), “Salgan del camino” con Rockal y la Cría  (1973), como solista: Pájaro y La Murga del Rock and Roll (1975), El rey criollo del Rock and Roll (1984), En el 2000... también (1994), El mago de los vagos (2006) y Sexogenario (2009).
Su última actuación fue en febrero de 2013 en Mina Clavero con la salud visiblemente deteriorada..



El cortejo fúnebre se acerca, sus ojos brillan, tiene la sabiduría de los años, sabe como acompañar en el dolor. En el final nadie habla,  un largo aplauso,  un puñado de tierra que se disuelve en el  mito.
La tarde avanza inexorable, un abrazo  nos despide para  siempre. El viento ha comenzado a soplar y la imagen de  Pajarito Zaguri  se funde en  las Sierras de Córdoba como un obvio suspiro.

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